
Casa de las Muñecas, burdel para los Caballeros del Emperador Carlos V.
Casa de las Muñecas en Garganta la Olla. Es una de las casas más singulares de la localidad, se identifica por su color azul en su fachada, situada en el número 3 de la calle chorrillo.
Dícese que cuando llegó Carlos V al Monasterio de Yuste en el año 1557 se creyó conveniente la apertura de varios prostíbulos o sitios para diversión de sus soldados.
La Casa de las Muñecas, no es más que unos de estos lugares o burdeles (parece ser que hubo al menos otros dos más), donde la comitiva del Emperador pasaba sus ratos de recreo.
Unos de los elementos que diferenciaban a la Casa de las Muñecas, era su color azul en la fachada, pero además una muñeca esculpida vestida de traje típico de la zona, en la cerradura también posee unos labrados similares y existía un mirador (hoy desaparecido) sobre la entrada que permitía ver a las prostitutas desde la calle.
Los súbitos del Emperador pasaban por aquí, bastaba con asomarse a la puerta y sin bajarse del caballo divisaban desde el mirador de la puerta el interior donde se encontraban las chicas, si se decidían entrar no tenían más que tocar a la puerta y caballo y caballero entraban en la casa, teniendo dentro unas caballerizas para alojar a los animales.
La tradición ha intentado sin éxito borrar la función de prostíbulo que tenia la casa de las Muñecas en Garganta la Olla, pero el grabado de la muñeca sobre el granito, la grandiosa balconada, su mirador sobre el dintel y el color azul de la fachada se lo han impedido.
Resulta sorprendente que la casa parroquial del pueblo situada cerca de este edificio se construyera, allá por 1760 con los ingresos obtenidos tras la venta de la Casa de las Muñecas.